Procedimiento Básico de EFT

ANTES DE EMPEZAR…

Existen algunas cosas que deberías saber y para las que deberías estar preparado.

1. Es indiferente. Antes de todo, no tienes que creer en la técnica en si para que sea efectiva. No tienes que cambiar tu religión o aceptar el dogma de alguien. Puedes probarla y ella funcionará, sin importar si crees o no.

2. No tiene sentido desde la razón lógica tradicional. Y es algo bueno que no tengas que creer en ella, porque no tiene sentido. Bueno, al menos no lo tenía para mí antes de probarla. La gente sólo sabe que es realmente efectiva. Desde la perspectiva energética de la física quántica es desde donde se puede entender su funcionamiento.

4. Puedes hacerlo tu mismo. Primeramente, trabajarás con esta técnica sobre tí mismo.

5. Esta técnica es completamente inocua. Nunca supe de nadie que haya sufrido daño alguno por el uso de esta técnica. No hay drogas, ni tan siquiera hierbas implicadas. Desde luego tampoco objetos con filo o punta.

6. Es rápida y fácil tanto de aprender como de evaluar. Puedes aprender todo lo necesario en menos de 30 minutos, y aplicar la técnica solo toma 2-5 minutos. Y, si la técnica funciona para ti, verás resultados positivos inmediatamente después de completarla.

7. El porcentaje de éxito es impactante. Terapeutas profesionales, quienes usan esta técnica con sus clientes, reportan un índice de éxitos que exceden el 90 %. Los clientes llegan con un problema, y se van una hora más tarde con su situación tremendamente mejorada.

Así, en definitiva, esta técnica es fácil, disponible públicamente, lleva media hora aprenderla, trae resultados inmediatos si trabaja completamente, y es absolutamente inocua. Sin embargo, te parecerá sin sentido, hasta que la pruebes.

Ahora, permíteme explicarte en que consiste.

LA TÉCNICA

La técnica básica puede describirse en una sola palabra: digito puntura.

La Digito puntura no es lo mismo que acupuntura. Acupuntura, que no es la técnica que usaremos, comprende clavar pequeñas agujas metálicas a través de la piel. La Digito puntura, que es la técnica que usaremos, implica solamente golpear repetidamente sobre puntos determinados del cuerpo con tus propios dedos. Nada para asustarse. Puedes cambiar la fuerza de tus creencias sólo golpeando sobre ti.

Para cada una de tus creencias, tienes lo que se conoce como una «respuesta visceral». También, por cada una de tus creencias, puedes medir la fuerza con la que está arraigada en ti, por decir, en una escala de cero a diez, o en una escala que tenga sentido para ti, que vaya desde «no existente» a «abrumadoramente poderosa». Si se encuentra en el fondo de dicha escala no es una creencia en absoluto, solo un pensamiento común. Una en la cima de la escala es una creencia poderosamente motivante.

Esta escala es útil para el trabajo que estás a punto de realizar, porque mide tu progreso. Comenzarás identificando la creencia que quieres modificar, construir o destruir. Primero, necesitas conocer cuán fuerte es antes de comenzar. Luego trabajarás en ella y, cuando hayas hecho el trabajo reevaluarás la fuerza de la creencia; si a cambiado, entonces el ejercicio ha sido eficaz.

La primera técnica a aprender es la de «demolición». Antes de que puedas construir una nueva actitud hacia la vida, debes deshacerte de la vieja. Y, de hecho, deshacerte de las creencias viejas y limitantes puede proporcionarte toda una nueva perspectiva ante la vida.

Entonces, comencemos con la técnica de «liberación emocional».

LIBERACIÓN EMOCIONAL

Cuándo usarla: Cada vez que aparezca una creencia negativa, limitante. Puedes trabajar sobre ella en ese preciso momento, o escribirla, o memorizarla y demolerla más tarde. Si posees una voz interna crítica, que te dice constantemente lo que estás haciendo mal, o que no eres lo suficientemente bueno, bien, puedes darle finalmente un uso positivo – ella te está sirviendo en bandeja de plata todos tus pensamientos limitantes.

Sumario: Para realizar la técnica de la demolición, primero debes calibrar la creencia / afirmación que quieres demoler. Luego tocas una serie de puntos en tu cuerpo. Luego te desplazas a través de una serie de «interruptores» neurofisiológicos. Y, finalmente, tocas nuevamente la secuencia de puntos. Todo esto está desarrollado en los párrafos siguientes.

LOS PASOS PARA LA LIBERACIÓN

Calibrando la afirmación: Cuando tienes una creencia negativa, dila para ti mismo, y mide la fuerza de tu «respuesta visceral». Tu objetivo aquí es llevar tu «respuesta visceral» para esa creencia en particular hacia abajo en la escala hasta «cero / no existente. Di la afirmación en un marco de aceptación, tal como «A pesar de [creencia], me acepto profunda y completamente.» (Por ejemplo, a pesar de que mi padre me hizo daño, me acepto profunda y completamente» – esto es para todos los chicos universitarios por allí.)

Tocando la secuencia: Esta parte conlleva algo de memorización, pero con un poco de práctica se convertirá en una segunda naturaleza muy rápidamente. La secuencia tiene 15 puntos a tocar que debes aprender.

  • Sobre tu ojo, en el comienzo de las cejas; [1]
  • Sobre tu ojo, en el final de las cejas; [2]
  • Sobre el hueso directamente debajo del ojo; [3]
  • Sobre el labio superior, directamente debajo de la nariz; [4]
  • El labio inferior, directamente sobre el mentón; [5]
  • Inmediatamente debajo de la protuberancia de la clavícula, donde ésta se une con el esternón; [6]
  • Sobre un punto blando ubicado entre una y dos pulgadas debajo del centro de la clavícula (lo sabrás cuando lo toques); [7]
  • Sobre el costado de tu cuerpo, debajo del brazo (para los hombres a la misma altura de la tetilla, para las mujeres a la misma altura de la tira del sostén); [8]
  • Sobre el lado de cada dedo (incluido el pulgar), alineado donde comienza la uña (mantén tu mano extendida, con la palma hacia ti – el lado del dedo mirando hacia arriba es el lado a tocar); [9-13]
  • El punto «golpe de karate», sobre el borde correspondiente al dedo meñique, entre las líneas de la palma de la mano; [14] y
  • Entre los nudillos de los dedos anular y meñique. [15]

El último punto, entre los nudillos, es especialmente importante. Me referiré a él como el «punto de las nueve gamas» más adelante.

Luego de que hayas calibrado la afirmación (arriba), repite la oración para ti mientras tocas los puntos, hazlo siguiendo la secuencia unas 7-9 veces en cadena. (Así, ocho toques al punto 1, luego ocho toques al punto 2, y así sucesivamente) No necesitas tocar con fuerza, Tampoco necesitas hacerlo en forma totalmente exacta, especialmente para los puntos ubicados en el torso. De hecho, el orden en que tocas los puntos tampoco interesa siempre y cuando los toques a todos. Tampoco interesa sobre cuál de los lados del cuerpo lo haces, puedes hacerlo sobre uno de los lados o alternar durante la secuencia, de cualquier manera que creas más cómodo. Sólo asegúrate de trabajar sobre todos los puntos, repitiendo la creencia limitante mientras lo haces.

Usando los interruptores: Una vez finalizada la secuencia (arriba), sigue tocando el «punto de las nueve gamas» durante toda la fase de «interrupción». Mientras tocas, moverás tus ojos en una serie de movimientos lentos y deliberados. Es normal que tengas problemas con ellos al comienzo. También es correcto hacerlo con los ojos cerrados.

  • Primero, comienza con los ojos mirando lejos sobre tu izquierda. Lenta y sostenidamente mueve los ojos hasta que estén mirando lejos a tu derecha, y luego muévelos hacia la primera posición (lentamente) sobre tu izquierda.
  • Segundo, haz lo mismo, excepto que en lugar de mirar izquierda-derecha-izquierda, mira abajo-arriba-abajo. Mueve los ojos lenta y sostenidamente.
  • Finalmente, comienza con tus ojos mirando hacia arriba, luego muévelos en círculo en sentido horario, toda la vuelta hasta que quedes mirando hacia arriba nuevamente. Luego haz el camino inverso describiendo un círculo en sentido antihorario.

(a propósito, en ésta sección de interrupción, si aún te queda algo de poder en el cerebro después de la demolición y todo lo demás, trata de concentrarte en la afirmación que estás demoliendo)

Una vez que hayas finalizado los movimientos oculares mantén estimulando el «punto de las nueve gamas», tararea algunas estrofas de una canción cualquiera, detente un momento, cuenta hasta cinco, y luego tararea algunas estrofas nuevamente. Luego, y sólo en ése momento puedes dejar de presionar el «punto de las nueve gamas».

Re-estimulación: Toma unas inspiraciones profundas. Calibra la afirmación nuevamente, tal como se describió arriba, y vuelve a presionar sobre la secuencia nuevamente, tal como fue descrito.

Re-afirmación: Toma unas respiraciones profundas, despeja tu mente, y luego re-dispara tu «respuesta visceral» de la afirmación que has demolido – la fuerza de esa respuesta deberá ser notablemente más baja. Repite el proceso de demolición hasta que no tengas ninguna respuesta acerca de la afirmación. En este punto, ya no es una creencia tuya.

¿Fuerte, no?

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